El
miércoles pasado empezamos en tiempo de Cuaresma y el primer día de este tiempo
tan particular, es el “Miércoles de Ceniza”.
A media tarde, nos dirigimos a la iglesia donde recordamos que durante
las próximas semanas, nos esforzaremos en hablar con nuestro amigo Jesús, en
ayudar, en compartir… para llegar así, siendo mejores de lo que ya somos. Para
que no se nos olvide, nos hicieron una cruz en la cabeza con ceniza.