Hace muchos años en Egipto (5 años)

Al regresar de las vacaciones de Navidad, nos encontramos con una aventura de lo más emocionante: conocer el Antiguo Egipto. Como siempre, era necesario saber qué era lo que sabíamos y qué queríamos saber de este tema tan interesante. Reunidos en asamblea, empezamos a compartir nuestros conocimientos y nuestros intereses. Este es el resultado:

Qué sabemos

   -Es una ciudad, hay gente

   -Hay esfinges y pirámides

   -Hay momias y faraones

   -El suelo es de arena

   -Hay pirámides con trampas

   -Las pirámides tienen puertas

   -Las pirámides están hechas de rocas de tierra

   -Hay camellos, serpientes

Qué queremos saber

   -Cómo son las trampas, las momias, los tesoros

   -Cómo son los egipcios y los faraones

   -Por donde se entra a las pirámides

   -Cómo han hecho las pirámides

   -Qué animales hay en Egipto

   -Cómo se vestían

   -Cómo podían coger los bloques para hacer las pirámides

   -Cómo vigilaban el camello

Para sumergirnos en el tema, escuchamos atentamente el cuento “Fátima, una momia muy responsable”. Aquí os dejamos el cuento para que todos lo conozcáis.

En primer lugar, era necesario saber dónde estaba Egipto y cómo podríamos llegar hasta allí desde Madrid. Después descubrimos sus características principales y de esta forma descubrimos que tiene un gran desierto, su larguísimo río Nilo, conocimos animales como el ibis y el cocodrilo, sobre el que aprendimos una canción que podéis escuchar a continuación.

Una vez situados, construimos la pirámide social del Antiguo Egipto y con ella descubrimos los diferentes grupos sociales y sus ocupaciones, centrándonos primeramente en el faraón.

Supimos cuál era su misión, sus símbolos y cómo al morir era momificado. Así descubrimos las momias, un tema de lo más motivador. Queríamos ver una momia muy de cerca y que mejor manera que convertirnos uno de nosotros en la momia Fátima. Y ahora que teníamos momia le podíamos cantar su canción.

Todos queríamos ser egipcios y algunos/as faraones/as. Para ello deberíamos vestir como lo hacían ellos. Trabajamos duro y… en un abrir y cerrar de ojos, habíamos fabricado nuestros disfraces.

Una vez conseguida nuestra transformación, decidimos bailar la canción de Drilo, el cocodrilo.

Seguimos aprendiendo y disfrutando con el Antiguo Egipto. Pronto os contaremos nuestras nuevas aventuras.