Durante esta semana teníamos que aprender a diferenciar
entre frío y caliente, y qué mejor forma de hacerlo que experimentando y
manipulando. Hemos utilizado unas bolsas con cierre zip, rellenas con gel. En
el caso del frío, la hemos congelado; y en el caliente, la hemos calentado en
el microondas.
Primeramente hemos manipulado las bolsas, hemos sentido
su temperatura y cómo al contacto, cambiaba la de nuestras manos.
Otro día, comprobábamos si el objeto que representaba un
dibujo que se nos mostraba estaba frío o caliente en la realidad, y para ello, tocábamos
la bolsa que se encontraba dentro de la caja, y así saber su temperatura. Una
vez conocida ésta, colocábamos el dibujo de la caja en el mural
correspondiente.