Esto es algo que
siempre se escucha… pero hoy, nosotros nos hemos dado cuenta de que no es así.
Primero, hemos visto un cuento en la pizarra digital “Por cuatro esquinitas de
nada” J.Ruillier. (Inclusión, amistad)
A continuación,
después de verlo una segunda vez, hemos comenzado un debate: ¿Somos todos
iguales?
Al principio
estábamos convencidos de que sí, pero después de intercambiarnos los zapatos
hemos comprobado que no era así. Además, en el espejo hemos visto las
diferencias de nuestra cara, los ojos, el pelo... Estaba claro, no somos
iguales.
También nos hemos
dado cuenta de que cada uno de nosotros es importante, a cada uno nos gustan
unas cosas y eso es lo más divertido. Nos hemos imaginado un mundo todo azul, y
otro todo rosa, y no nos han gustado. Por eso nos ha encantado el cuento del
cuadradito, y todo lo que nos enseña.
Todos somos
importantes y por eso todos tenemos que poder entrar por la puerta.
Aquí os dejamos el
cuento.